lunes, 2 de marzo de 2015

Artículos ¿EL RENACER DE LA RADIO?

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Emisoras virtuales independientes en Bogotá
¿EL RENACER DE LA RADIO?
Los avances tecnológicos de cada día hacen expirar lo que ayer fue nuevo. La radio, amenazada desde hace años por la televisión y el internet, se mantiene. Hoy, con un enfoque diferencial, no comercial, y focalizado en gustos y herramientas digitales camina hacia el futuro.
Por: Óscar Darío Carrión Vera
Estudiante Facultad de Comunicación, Información y Lenguaje

Noviembre 9 de 2014
La llegada del ciberespacio marcó también el inicio de la llamada era de la información. Para el año 2013, según cifras del Banco Mundial, el 51,7% de los colombianos cuentan con acceso a la red mundial. Quiere decir, que se pueden conectar a ésta y no solo para ver contenidos. Ahora pueden crearlos, compartirlos, y modificarlos según sus preferencias. Todo gracias a la web 2.0.

Imagen tomada de IVOOX
Redes sociales, software y algunas aplicaciones nacieron como nuevos medios comunicativos buscando amplia e inmediata conectividad, además de mayor interacción entre los seres humanos. Esto explica, en gran parte, la necesidad de cambio y la adaptación que ha tenido la prensa escrita, los libros, la televisión y, por supuesto, la radio.
Su historia en Colombia data de 1929, cuando el entonces presidente de la República, Miguel Abadía Méndez, inauguró la primera estación, denominada HJN. Desde entonces, con el paso del tiempo ha sorteado momentos importantes como la llegada de la televisión y el internet, sin ser rezagado u olvidado.
En el año 1995, la empresa estadounidense RealNetworks lanza un formato de audio denominado Real Audio, el cual es utilizado para hacer transmisiones en tiempo real. Esto permite que el usuario pueda descargar y reproducir un archivo, sin necesidad de alojarlo en el disco duro local de su equipo. Cualidad que, sin duda, se empezó a popularizar entre las estaciones de radiodifusión, que vieron allí una oportunidad para traspasar fronteras.
En la actualidad, esta propiedad es más conocida como streaming o corriente de transmisión que, básicamente, tiene la misma funcionalidad. La popularidad de este sistema empezó en el año 2000 y, desde entonces, la concepción en la forma de hacer radio, principalmente con relación a la música, y quiénes la hacían empezó a cambiar.
Los que descubrieron y exploraron la posibilidad de compartir determinados gustos musicales o hablar de algo a aquellos que pudieran escuchar esas emisiones de sonidos, allanaron el destino de un medio que buscaba alternativas.


Sin cifras oficiales ni reales
Las emisoras virtuales independientes son proyectos intelectuales de profesionales o empíricos amantes de las comunicaciones, no están relacionados con marcas o grandes empresas y solo anhelan hacer partícipe a los demás de lo que saben o tienen.
A pesar de que las grandes compañías aun lideran, de lejos, las comunicaciones radiales, las facilidades que ofrece la web a través de hosting y streaming gratuitos han motivado a cientos de personas para iniciar proyectos a través de la red.
Desde casa, cualquiera con un equipo, portátil o de mesa, un micrófono, si desea hablar, una conexión de banda ancha con capacidad promedio de 5 megas, o menos, y los conocimientos básicos en manejo de herramientas comunes del computador, puede hacer una transmisión.
Para el año 2012 la empresa de consultoría y mercadeo Cifras y Conceptos, hizo un cálculo piloto de la inversión publicitaria en Colombia, dentro del cual, según el resultado, encontró 510 emisoras virtuales en el país (Ver estudio Cifras y Conceptos No. 10). Lo que, en sí, no dice mucho, teniendo en cuenta que solo las discrimina como un ítem más, pero no existe una clasificación entre éstas.
La magnitud de creación de emisoras online es tal que, en el mundo, cada día aparecen y desaparecen miles sin dejar rastro. Encontrarlas es por casualidad o recomendación y hallar una estadística local, nacional o internacional, puede ser casi imposible. “Es una tarea complicada”, asegura el coordinador de derechos digitales de Sayco, Javier Martínez, “el problema radica en que no es fácil buscarlas”.
Tanto es así que el propio Ministerio de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), según documentos consultados, no cuenta aún con datos aproximados. Por ahora la alternativa es que muchos portales de internet ofrecen el espacio para registrar, alojar y transmitir la información de estos sitios, una especie de directorio para los usuarios.
Lo que sí es real, es que los dos últimos años han sido productivos si de números hablamos. Tres de los bancos más importantes en este instante son www.raddios.com, www.colombia.com y www.radioscolombia.com. En ellos dice que, solo en Bogotá hay, según el filtro por ciudad, 696, 314 y 150 radios respectivamente, pero teniendo en cuenta que varias se han reportado en todas las páginas web y que la gran mayoría hacen parte de las grandes cadenas del país o pertenecen a grandes marcas.
La falta de estadísticas y la deficiencia de un método de registro son un gran dolor de cabeza para este medio. Sin embargo, tomando como referencia los portales raddios.com y radioscolombia.com, se logró establecer que en la capital de la República existen, o existieron, al menos 178 emisoras virtuales independientes, de las cuales el 37% están fuera del aire. Bien sea porque no tienen señal 24 horas o simplemente porque desaparecieron (Ver gráfico 1).
Los grandes jugadores del mercado radiofónico continúan en el espectro, pero también le han apostado al aspecto digital, trasladando la señal de sus estaciones al streaming, creando espacios exclusivos para estas. “Si no fuera importante, RCN no lo haría”, comenta el director de la asociación Digital Stereo Radio, Luis Alberto Martínez Porras, y en esto coincide con el productor de medios audiovisuales y periodista, Gabriel Pinzón, “todo está en que ellos ya lo incluyen dentro de su catálogo de pauta”, dice.
Otros, rezagados por los grandes, cedieron su lugar en el dial y se dedicaron a explotar la nueva señal. Tal es el caso de la Superestación (antes 88.9), que hoy tiene, en un solo portal, más de diez opciones diferentes para escuchar; otro caso es el que ocurre con las marcas como Coca Cola, Bogotá Beer Company y Full 80’s que, como opción comunicacional, han dado apertura a sus propias emisoras.


Neonatas digitales
Jóvenes y adultos se han aventurado a explorar sus habilidades en la locución y sus posibilidades de hablar a través de un micrófono para que otros los conozcan y escuchen. Las historias detrás de la gran mayoría de las radios virtuales son bastante peculiares y están lejos de buscar un eje lucrativo.
“La idea de Cultura-Geek Radio nace hace tres años y medio de un grupo en Twitter en el que se hablaba de lo mismo: el gusto por la tecnología”, afirma su director y co-fundador, Luis Alberto Bravo Caballero, un ingeniero que por gusto al tema y con recursos propios dio apertura a este proyecto.
La pasión y las falencias musicales, esa resistencia a escuchar lo mismo, también se convierten en  motivador para crear alternativas. “A mí me gusta mucho la salsa, no el choque que, con el respeto, eso no es música. Me encantan los grandes clásicos y los grupos que solo cuando uno conoce o va a discotecas suenan”, explica el director de Salsa y Soneo, Daniel Román, quien hace cuatro años se conectó a las plataformas virtuales.
Es que los contenidos en este medio alternativo están pensados de manera tal, que todo parece muy especializado, que es donde podría estar el secreto. “El Café del Mundo surgió en el año 2007, cuando por recorte de personal salí de la W, allí fui libretista y productor”, explica Ricardo Mendivil, fundador y director de esta emisora, “siempre mi especialidad fue la música del mundo (flamenco, Bossa Nova, jazz) y mucha gente extrañó eso y me pidieron que hiciera algo. Ahí arrancó todo esto”.
Lo que es claro, es que muchos que empiezan no tienen la constancia y responsabilidad que se adquieren cuando de medios se trata. Todos coinciden en que se debe pensar en crear buenos contenidos, pero diferentes a los ya existentes.
“Muchos de los que están haciendo radio digital no son profesionales. No son comunicadores ni periodistas, mucho menos locutores. Entonces están manejando algo light, de mala calidad o mal preparado y así no funciona. La esencia es el locutor, pero hay que ofrecer algún diferencial”, precisa el experto en radio tradicional, Gabriel Pinzón.
En realidad eso parece que lo afirman los promedios de audiencias en algunos medios. Pocas son los que saltan la barrera de los 10 oyentes conectados en vivo y las que lo logran, son religiosas o pertenecen a grandes marcas (Ver gráfico 2).
“Aquí la situación es que se está pensando como radio tradicional, cuando en internet la radio no existe. El usuario escoge lo que se parezca a él, se deben plantear franjas internacionales, no es solo local, y buscar convertirse en compañía, calidez y amistad, interactuar y conversar con el oyente”, recalca Mendivil.
Las fallas se están presentando en la forma, no en la idea. Por eso las cifras son, para algunos, negativas y desaniman. De ahí que se debe es importante suplir una necesidad comunicacional de un grupo poblacional, de una comunidad específica y que no sea solo un hobby.
En el ciberespacio también predominan los medios tradicionales (Ver Ranking Raddios), sin embargo los medios digitales alternativos se están abriendo espacio y empiezan a ascender en el ranking de sitios como Raddios.com. Cuarenta y cinco independientes están ubicadas en el top 100, aunque les falta mucho. Por encima está Suba Alternativa, que es la primera online gran ubicada en la ciudad y luego Bogotá Beer Company Radio, una independiente y otra relacionada con una marca. (Ver Tabla 1).
Cifras, sin confirmar, de emisoras virtuales independientes, que se miden por el servidor de streaming o con herramientas como Google Analytics, entregadas por los directores, dan cuenta de que Salsa y Soneo tiene cerca de seis mil oyentes por mes; El Café del Mundo 45 mil y Digital Stereo 102 mil radioescuchas.
Camino al futuro
Desde su concepción, estas llamadas radios virtuales fueron concebidas con el fin de satisfacer un gusto personal masificado a algunas personas. Por eso muchas no se han planteado ir más allá. Sin embargo, todos los que la hacen coinciden en que quieren ser escuchados por más oyentes que se identifiquen con lo que se está haciendo.
Gran parte de sus seguidores los han logrado atraer a raíz de las redes sociales. “Permiten que la gente se apropié del espacio, ayudan mucho, sin duda se deben utilizar, pero así mismo son muy cambiantes”, manifiesta Ricardo Mendivil.
Otra manera diferente de proyectarse con paso importante hacía el éxito es buscar alternativas, cambiar lo común. “Las emisoras en línea deberían ser podcast, es que al aire es actualidad. Ahora nadie tiene tiempo para sincronizar con mi emisión, eso déjenlo para lo tradicional. Hay que pensar en volver el contenido consumible digitalmente”, señala el director estratégico de la agencia BRM, Tuyo Isaza.
La realidad es que tan solo una inmensa minoría ha logrado comprender la era en la que vive. Crear nombres llamativos y entender por qué y para quién se hace lo que se está haciendo, así como tener claro que la competencia es diferente, son algunas de las premisas a tener en cuenta. Saber que ahora hay plataformas y portales de todo y para todo.
Al respecto, Isaza explica, “todo usuario es importante. Cinco, diez o los que sean se deben valorar. Pero también es necesario saber que la forma de medir es diferente. El streaming, salir en vivo, es una opción, hoy cuenta mucho más y son más relevantes las reproducciones, los clic que se logran”.
Al ofrecer un portal, sea lo que sea que se maneje es fundamental ofrecer cosas llamativas al usuario porque todo está conectado. “En muchos casos el website es el gancho. Debo dar algo para que los usuarios me visiten. La emisora puede ser un plus, luego ya no”, enfatiza Luis Alberto Bravo.
Economía, factor fundamental
Las emisoras virtuales independientes tienen un destino por forjar que, evidentemente, depende de sus propios fundadores. La cuestión está en que se pueda monetizar y convertir en autosuficiente. Pocas están pensadas con proyecciones a futuro. Muchas empiezan como juegos o hobbies sin continuidad, lo que le está haciendo daño al medio.
La estructura administrativa de funcionamiento de las radios digitales, en la gran mayoría de casos, no existe. El dueño es el mismo director y locutor. El costo de sostenimiento oscila entre los 200 mil y los cuatrocientos mil pesos. Los pagos por derechos de autor son mínimos o nulos y casi nadie se toma el tiempo de leerlos. El financiamiento que reciben depende del mismo dueño. Los registros y la legalización del medio ni se contemplan, de ahí que nadie tiene compiladas estadísticas reales.
 “Algunos hemos decidido tomar esto como opción de vida, pero necesitamos que el Ministerio de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) piense en una regulación sobre el medio, no sobre el internet, y que los demás comprendan la importancia que esto tiene”, asegura Luis Alberto Martínez.
Las agencias de publicidad y de medios aun no reconocen el trabajo serio que comunicadores y otras personas están realizando. “No tiene sentido decirle a un cliente que paute con estos medios. Mientras con un millón de pesos en una cadena grande te da un impacto de 500 mil o más, allí por lo mismo te dan 10. No sirve”, asevera Tuyo Isaza.
Factores fundamentales que se deben aplicar: disciplina, creatividad y talento. Forma de crear empresa si existe, vender es posible. “No es solo bajar música y ya. Hay que pensar en estrategias, alianzas y actividades”, comenta Gabriel Pinzón. Por su parte, Tuyo Isaza recomienda, “primero hay que consolidar las cosas y luego pensar en monetizar. Hacer lo que se ama, pero también trabajar en lo que se ama. Inventar, administrar y vender a través de otras maniobras, pero con calidad en el producto”.
Camino al éxito muchos, lograr la victoria y obtener el premio pocos. El secreto está en transformar lo actual y que los productores de radio del siglo XXI decidan el rumbo: seguir igual o diferenciarse y trascender.

Fuentes consultadas:

6 comentarios:

  1. El cierre exitoso de la feria de comunicaciones en el sector de la salud.
    Interesante artículo se puede leer aquí. Fotos de alta calidad de noticias. Hay mucha gente en la foto, y será interesante ver y leer en los enlaces aquí:
    https://quivo.co/15955-cierre-exitoso-de-feria-sobre-las-comunicaciones-en-la-salud.html
    2016.

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  2. Music is the most beautiful in the world,it makes people kinder, more generous,more beautiful body and soul.People who sing will do a good job,but unfortunately they too can get sick and die.Two days ago died singer Juan Gabriel from poisoning https://quivo.co/22098-juan-gabriel-murio-por-envenenamiento.html.The doctor claims that he was poisoned on purpose.

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